En la década de los 80s surge una crisis deportiva, dejando
los peores registros en la historia del equipo que tiene como consecuencia
múltiples canjes de jugadores. En la 1979-80 y con indeseable marca de 48
derrotas en una temporada de 70 encuentros, Magallanes ocupa el último lugar a
24 juegos y medio del puntero. Para colmo, el conjunto pierde los catorce
juegos de la serie contra los Leones del Caracas y Horton pasa de héroe a
villano siendo cesanteado, sucediéndole en el cargo el "Salón de la
Fama" Luis Aparicio.
En la peor temporada de su historia, la 1980-1981,
Magallanes termina con 16 ganados y 44 derrotas, una marca que ni siquiera los
equipos de expansión han registrado.
En medio de la temporada 1983-1984 Magallanes logra el pase
al play-off al vencer a los Tigres de Aragua en juego extra por el cuarto
lugar. Luego la tropa turca es barrida por las Águilas del Zulia en la
semifinal. Finalmente Zulia se alzaría con ese campeonato y posteriormente en
la Serie del Caribe en Puerto Rico, siendo el tercer título en la zona para la
LVBP.
Para la temporada 1984-1985, Magallanes logra el cuarto
lugar y clasifica al play-off, pero cae en cinco juegos frente a los Tigres de Aragua.
En la temporada 1985-1986, la mejor del Magallanes en esta década. Al concluir
la ronda eliminatoria Magallanes queda en el primer puesto (37 ganados y 28
perdidos, alcanzando de paso la mayor cantidad de triunfos para el club en una
campaña), pero no pudo pasar a la final pues sucumbe ante Tiburones de La
Guaira en cinco juegos.
Para la temporada 1986-1987 llegan a formar parte del equipo
Clemente Álvarez, Gilberto Roca, José Villa, Willian Magallanes y Carlos
García, como parte de un proceso de renovación.
Al principio de campaña el club experimenta una seguidilla
adversa de 4 blanqueos consecutivos y 41 entradas sin fabricar anotaciones. El
6 de diciembre Magallanes establece un récord de carreras al derrotar 23 a 0 a
las Águilas del Zulia, la mayor diferencia con la cual ha ganado un equipo en
la historia de la LVBP. Sin embargo Magallanes culmina eliminado y en el
sótano.
Para la temporada 1987-1988 apareció un viejo conocido, el
dominicano Felipe Rojas Alou a dirigir al elenco marino. Alou, toda una leyenda
como jugador y dirigente en la MLB, había sido mánager campeón una década antes
(1977-1978) con los Leones del Caracas. Ahora con Magallanes, el equipo
experimenta una arrancada caliente y gana todos sus partidos del mes de
octubre, siete en total. El equipo termina segundo, pero cae en el Round Robin,
nuevo formato empleado por la LVBP desde entonces hasta hoy. La siguiente
temporada (1988-1989) sin embargo, no fue auspiciosa para Alou y sus muchachos.
El equipo queda eliminado y en el sótano, entre otras cosas debido al anémico
promedio de bateo colectivo de.229, el más bajo del conjunto desde su regreso a
la Liga en la 1964-1965.
En la temporada 1985-86, el prospecto sensación de Pittsburgh, Barry Bonds, se convierte en el líder del equipo turco en jonrones, empujadas, anotadas y robos.
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